22 de abril de 2011

Entre un mar de hojas secas.

I


Eran ya las 6:30 de la mañana y me preparaba mentalmente para una nueva jornada. A veces me preguntaba por qué lo estaba haciendo; otras, por qué nada resulta como yo quiero(...) mientras miraba por la ventana del tren cómo la noche aún no se quería ir y ahí me perdía en el laberinto de mi propia mente, hasta llegar a la estación de combinación. La hora pasaba rápido, el tren corría armónicamente a las manecillas del reloj. En un abrir y cerrar de ojos, ya estaba caminando hacia la puerta de la Universidad, pensando a qué me enfrentaría: si al patético juego de siempre o si iba a descubrir algo nuevo. Eso no lo sabría hasta que saliera el Sol. 
El día comenzaba bien, no habían problemas con mi exterior, las clases mantenían mi cabeza centrada en las matemáticas y los amigos llevaban mi ánimo. El ambiente ya estaba más tibio y no había nada más que hacer que conversar, reír y esperar al almuerzo. Bueno, yo esperaba algo más, a alguien más. Esa chica que por simple coincidencia conocí, esa chica de bellos ojos oscuros, de tenue color de piel, de tierna presencia, de cálido sentido del humor. Esa chica que hacía que mi corazón comenzara a correr de manera distinta, esa chica que por uno u otro motivo, me quitaba el aire. No creía en la situación por la que pasaba, cómo llegó a mí. Era algo que tomaba control, hace mucho que no pasaba por algo así, ya era mucho tiempo que no sentía ese ligero rubor en mis mejillas y, nuevamente el centenar de preguntas en mi cabeza, obvio, no encontraba razón, no sabía cómo había pasado, en tan poco tiempo, sin conocerla demasiado. Pero, me sentía de maravilla con ella a mi lado, solo cuando lo estaba. Pasaba la hora, y su presencia desaparecía, solo me quedaba el dulce aroma de su piel, con el qué podía reclutar esos pequeños recuerdos del momento, y me perdía mirando el camino del Sol. 
Llegaba ya la tarde, el cielo se teñía del maravilloso espectro de colores de otoño. Las nubes, no tan distante una de la otra danzaban obstaculizando los débiles rayos de luz, otras se aglomeraban entre las montañas y el ruido pertinente a la hora punta. Solo, recorría el gran parque, en busca de nada más que la tranquilidad.
Es el fin de Abril, las hojas ya están por los suelos en toda la ciudad. Las ventiscas cada día son más frías y las tardes cada vez son más cortas. Era lo que estaba esperando, era lo que quería, pero también quería responderle a mi corazón el por qué de lo que sentía. Es que estaba enamorándome? Aún hay mucho por lo que pasar. Estoy preparado para esto? Aún tenemos mucho que pensar, aún tenemos mucho que reconstruir, diría mi mente.-


11 de abril de 2011

Está cerca, el viento del norte se acerca.

" I was buried alive, I came back to haunt you.  Are you dying to believe? I can't go on without you, all we are is too fast for love. We're too young, I hate to love you, the night sky, hangs above you...
But you can't be missed if you never go away.
It's the end of a broken heart, I went on without you, I was lost from the start. 
I did what I had to, all we are is too fast for love. You don't know what I've seen, you can see that I've been damaged, without you, and I don't know where you've been, I can wash your sins away... "
You can't be missed if you never go away - Cobra Starship

Y ahora que llegó la noche, vuelvo al calor de mi casa. Luego de pasar horas y horas, pensando qué hacer, a qué me estaba enfrentando, me tenía colapsado de ideas vagas que se unían a otros sentimientos vagos y generaban una sensación de angustia en mí... típica de días nublados, pero me gusta, me gusta sentirlo. Patético, pero soy un masoquista inconsciente de mi propio masoquismo. 
Como ya es de saber, vuelvo al colapso.
Si largo tiempo sin distraerme del mundo no me hizo caer. Si las interminables e irónicas peleas en casa no me hicieron caer. Si las mortíferas conversaciones que tuve durante este último tiempo no me hicieron caer... Por qué algo tan mísero como el amor sí puede hacerlo, al primer soplo del viento? Es algo a lo que soy débil, cuando es verdadero... soy débil, sí.
Puedo decir algo antes de terminar? 
Necesito de ti.-

9 de abril de 2011

Ventoso Abril.

Ya es casi un mes de mi primer día de clases en la universidad y todo sigue tan normal como antes. Hablo de normal para hacer una semejanza con lo que pasaba hace meses atrás; años, quizás. He encontrado potenciales personas en las que he entregado mucha de mi confianza, a nivel de llamarlos amigos y... eso es bueno, encontrarse personas así en la vida siempre es bueno. Además, no son un tipo muy alejado al mío, tenemos muchas cosas en común, muchas cosas que me hacen sentir situado en un lugar más que nuevo, común.
Por otra parte, tengo miedo, miedo a enamorarme otra vez. Estoy sintiendo tantas cosas por alguien que todos los días me quita el aliento pero estoy seguro que nada resultará como yo quisiera, y no quiero, no estoy preparado para vivir así otra vez.
Aunque sé que tú nunca llegarás a este blog, me gustaría dedicarte las siguientes tres palabras: Te quiero mucho.-